“Nosotros, los pueblos…” no debemos seguir consintiendo la barbarie de la pena de muerte y de las ejecuciones

martes, 5 de enero de 2016

Arabia Saudita sigue siendo uno de los países donde cada día se vulneran los derechos humanos mientras  -poderoso caballero es don dinero- los demás países miran a otro lado y, con la codicia  de las grandes obras públicas o del suministro de combustibles, siguen soslayando sus gravísimos dislates.

La barbarie de Arabia Saudita ha llevado en estos últimos días a ejecutar a más de cincuenta personas “de una tacada”. Y no pasa nada. Europa omite exigir el cumplimiento del artículo 2º de su Carta de Derechos Fundamentales… porque es una unión estrictamente monetaria… y porque el Partido Republicano de los Estados Unidos sigue aplicando la pena capital en los Estados en los que gobierna. Y, por tanto, mientras en Texas sigan ejecutando, ¿cómo podremos recriminar a los de Arabia Saudita?

Merecen la frase terrible de Albert Camus: “Les despreciaba, porque pudiendo tanto, se atrevieron a tan poco”.

Clamor popular para que las Naciones Unidas, marginadas por los “globalizadores”, sean refundadas sin dilación y actúen con diligencia para que la pena de muerte sea pronto un amargo recuerdo.

2 comentarios

Malpensando, uno llega a la conclusión de que parece que institucionalmente le interesa a Occidente mantener vitales las percepciones sociales de regímenes autoritarios conceptualmente ¨malos malísimos¨ fuera de nuestras fronteras, para acto seguido alabar lo bien que estamos en casa. Arabia, Cuba, Venezuela,.. hasta Irán puede ser un buen ejemplo de rabiosa actualidad. ...La rueda del confort local que lleva a la indiferencia más allá de nuestras fronteras.

..Esto es un cuento de la abuela antiquísimo, que por lo visto y a tenor de los hechos, funciona en sociedades ineducadas hasta límites alarmantes. Los fundamentos más elementales de las teorías del marketing exponen desde sus orígenes más remotos, desde que existe el marketing como tal, un problema antes de ofrecer su procedente solución. Pues esto es igual: las sociedades se convierten así en perfectas masas modelables al antojo de las manos que las modelan.

Todo es desesperante Sr. Federico. Esta Civilización tiene los días contados, parece que nunca se aprende. Mi admirado Manu Leguineche decía "El S.XX ha sido para mí el siglo desaprovechado; ...tanto progreso tecnológico para tan poco avance humano".

Un abrazo.

7 de enero de 2016, 15:45
Juliana Luisa dijo...

¿Conseguiremos que el siglo XXI sea un siglo más humano? La responsabilidad es de los ciudadanos.
Un saludo

7 de enero de 2016, 18:55