La solución: ayuda al desarrollo humano y sostenible

miércoles, 23 de septiembre de 2015

En el excelente diseño del Sistema de las Naciones Unidas de Roosevelt, con instituciones y programas especializados en alimentación (FAO), salud (OMS), trabajo (OIT), educación, ciencia y cultura (UNESCO), infancia (UNICEF)... destacaba, por la importancia de los recursos asignados y el apoyo generalizado, del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Tres palabras clave para asegurar un futuro solidario y que permitiera a todos una vida digna en los respectivos países de origen: 
com-partir 
co-operar 
com-prometerse 

La Constitución de la UNESCO proclamó en 1945 que "la Humanidad se guiará por principios democráticos"... y la educación procurará que, siendo todos los seres humanos iguales en dignidad, se comporten "libre y responsablemente" 

Poco a poco, las ayudas se convirtieron en préstamos concedidos en condiciones draconianas, la cooperación internacional se transformó en explotación, el Banco Mundial "para la Reconstrucción y el Desarrollo" perdió su apellido para ser herramienta al servicio de los países más prósperos,... y, para colmo, el neoliberalismo de Reagan y Thatcher cambió los valores éticos por los bursátiles, las Naciones Unidas por grupos plutocráticos (G7, G8, G20) y situó a la Organización Mundial del Comercio directamente fuera del ámbito de las Naciones Unidas. 

El resultado está a la vista: una economía de especulación, deslocalización productiva y guerra (no me canso de decir que cada día se gastan más de 3.000 millones de dólares en armas y gastos militares al tiempo que mueren de hambre unas 20.000 personas, la mayoría niñas y niños de uno a cinco años de edad), una drástica reducción de las ayudas al desarrollo, paraísos fiscales colmados, tráficos de toda índole en medio de la mayor impunidad a escala supranacional, deterioro de la habitabilidad de la tierra... 

Menos mal que, desde hace poco, la voz de la gente, gracias a la tecnología digital, ya puede oírse y hacerse escuchar por los encumbrados; los seres humanos -salvo ridículas excepciones- se siente progresivamente ciudadanos del mundo; y la mujer, secularmente aislada por el poder absoluto masculino, comienza a intervenir, con las facultades que le son inherentes y distintivas, en la toma de decisiones... 

Ahora, como acabamos de ver en el terrible caso de los refugiados y emigrantes, ha sido el grito de la gente y sus brazos abiertos los que han logrado cambios radicales en la cerrada y opaca actitud de los gobernantes. Ahora, en muy poco tiempo, hemos visto trastocarse organigramas de poder que parecían inmutables. 

Ahora, querido y admirado "El Roto", serán "nosotros, los pueblos..." los que darán respuesta a tu formidable viñeta del 19 de septiembre en El País, como hace poco la dieron a la del niño Aylan en la playa turca de Ali Hoca Burnu.

















Gracias. Es así, con llamadas a la conciencia popular, como se enderezarán los torcidos caminos actuales y se consolidará una democracia genuina a escala personal, local, nacional, regional y mundial. 

Gracias.

Refrán catalán muy oportuno

lunes, 21 de septiembre de 2015

"Als vells i als minyons no els prometis el que no els donis" (A los viejos y a los niños no les prometas lo que no les des)...

Sabio refrán catalán.

Tenerlo en cuenta.

Una nueva era

miércoles, 16 de septiembre de 2015

En estos últimos meses, tanto a escala nacional como internacional (incluyendo las Naciones Unidas), he tenido ocasión de observar la “sorpresa” con que algunos políticos, parlamentarios, representantes de países… veían tambalearse los esquemas “habituales”, atados y bien atados por quienes, desde siempre, encumbrados, han ejercido el poder siguiendo las pautas habituales, incapaces de apercibirse de la histórica irrupción de la gente en escenarios en los que hasta ahora no tenían acceso. 

“¿Qué está pasando”?, se preguntan, mirándose unos a otros con extrañeza. Lo que está pasando es muy sencillo y se había anunciado hace ya algún tiempo: los seres humanos están dejando de ser invisibles, anónimos, temerosos, silenciosos, espectadores, obedientes… y están pasando a ser actores que participan, protestan y proponen. Y es que ahora ya pueden expresarse, y en consecuencia, poner en práctica el lúcido inicio de la Carta de las Naciones Unidas: “Nosotros, los pueblos…” 

Los nuevos protagonistas están trastocando los organigramas políticos tradicionales y comienzan a “cambiar de rumbo y nave”, como aconsejaba José Luis Sampedro. 

Muy pronto ya no será posible seguir manteniendo la vergüenza de unos grupos compuestos por unos cuantos países acaudalados intentando asumir –otro gran fiasco del neoliberalismo- la gobernanza mundial (¡193 países!); ni se permitirá que se presenten programas electorales que al día siguiente se cambian indecorosamente; ni que se apliquen “rodillos” parlamentarios basados en mayorías absolutas electorales pretéritas; ni que se sigan disminuyendo las ayudas al desarrollo… mirando para otro lado para no contemplar los desgarros de la extrema pobreza y desamparo, con miles de personas muriendo cada día de hambre al tiempo que se invierten en armas y gastos militares –no me canso de repetirlo- 3,000 millones de dólares; ni se tolerará que se celebren reuniones y más reuniones, Cumbres y más Cumbres sobre temas como el “desarrollo sostenible”, cuando –aún con el inmenso riesgo de alcanzar puntos de no retorno, afectando irreversiblemente la habitabilidad de la Tierra- no se aportan los recursos ni se adoptan las apremiantes medidas ineludibles… Es bochornoso pensar que –como acreditan las desgarradoras imágenes de inmigrantes- las ayudas al desarrollo hayan decrecido enormemente, otro de los grandes “efectos colaterales” del actual sistema económico… 

La transición de una economía de especulación antidemocrática y anti ecológica, deslocalización productiva y guerra, a una economía basada en el conocimiento para un desarrollo global sostenible y humano se logrará porque varios millones de “Nosotros, los pueblos…”, en grandes clamores populares, lograrán los radicales cambios hasta ahora irrealizables. 

Participación ciudadana y ciudadanía mundial. Aunque algunos obcecados se resistan a reconocerlo, una nueva era se avecina.

Una imagen horrenda para desencadenar la solidaridad

martes, 8 de septiembre de 2015

La UNESCO define a los "educados" a quienes son "libres y responsables". Seremos responsables cuando no necesitemos imágenes como ésta para reaccionar. Cuando no olvidemos que cada día mueren de hambre miles de niños, mujeres y hombres al tiempo que se invierten 3.000 millones de dólares en armas y gastos militares. Cuando no miremos a otro lado sabiendo que estamos deteriorando el medio ambiente. Cuando exijamos con firmeza a los mandamases con grandes clamores populares que la ayuda al desarrollo debe incrementarse para conseguir una vida digna para todos. Entonces seremos responsables. 

 Y dejaremos de merecer la terrible exclamación de Albert Camus "Les desprecio, porque pudiendo no se atreven".

Ante procesos potencialmente irreversibles no caben aplazamientos: cartas al Presidente Obama y a las ONG.

martes, 1 de septiembre de 2015

Ante procesos potencialmente irreversibles no caben aplazamientos: en cuestiones de medio ambiente y de dignidad humana pueden alcanzarse puntos de no retorno. Sería una irresponsabilidad histórica permitir que la habitabilidad de la Tierra se deteriorara. Y no remediar el drama humano de los refugiados e inmigrantes. Y no detener la locura del llamado Estado Islámico. Y de la guerra en Siria. Y del hambre, que cada día causa –no me canso de repetirlo- la muerte de miles de personas al tiempo que se invierten en armamento y gastos militares 3000 millones de dólares. Bastaría con reducir razonablemente este “derroche” bélico para poder hacer frente a estas necesidades acuciantes de la humanidad y, particularmente, a las potencialmente irreversibles. 

Hay que actuar con rapidez, aplicando todos los conocimientos disponibles para detener y reconducir presentes tendencias. 

Por estas razones, hago públicas las cartas que al respecto he escrito recientemente al Presidente Obama y las ONG de las Naciones Unidas. 

Estamos elaborando una Declaración conjunta reclamando con urgencia la convocatoria de una sesión extraordinaria de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la que se adoptarían las medidas a escala global apropiadas –porque la amenaza es global- y se decidiría una “hoja de ruta” para la refundación del Sistema (multilateralismo democrático).