PIGS... y ( I )...

martes, 11 de enero de 2011

Los PIGS ("cerdos"!)

Portugal

Irlanda

Grecia

Spain...


deben caer uno tras otro sea como sea: son el flanco periférico de la eurozona... y la "dolar zona" ataca por orden de debilidad: primero, Grecia.

Gran movilización europea y, a pesar de las imprevisibles vacilaciones de Alemania, tan favorecida en la época de bonanza por los "grandes negocios" griegos, se logró rechazar, al menos provisionalmente, el ataque de "los inversores". Se puso de manifiesto -sin que los buenos economistas y financieros armaran el revuelo merecido- la vinculación de las noticias sobre el colapso europeo a grandes grupos mediáticos y financieros de los EE.UU.

Luego le tocó el turno a Irlanda que hasta hace pocos meses -¡revisemos las hemerotecas!- se ponía como "ejemplo" de desarrollo neoliberal por los mismos economistas, escuelas de administración de empresas y agencias de calificación, instituciones bancarias internacionales... y partidos y líderes políticos ensimismados con la globalización. Ahora todos miran hacia otro lado -especialidad en la que se están ejercitando últimamente, con gran descaro, muchos políticos- y, de nuevo, ha sido necesario un gran tumulto para rescatar al trasquilado país ex-ejemplar.

Pronto podría llegarle el turno -si la Unión Europea no es capaz de poner de una vez los puntos sobre las "íes"- a Portugal y, por extensión, a España. El triunfo de los ultra-republicanos en Norteamérica no favorece, desde luego, la capacidad de reacción. Portugal con Grecia y España, constituyen el reducto (¡exactamente la figura opuesta a la de hace unos años!) de gobiernos socialdemócratas. Los famosos "nórdicos" y los grandes países centroeuropeos están todos en manos de una derecha que, con frecuencia, se inclina hacia extremos preocupantes.

El acoso no cesa, activado ahora más todavía por el largo brazo del "Tea Party". Si Portugal es el tercero en danza... el "contagio", según la acepción patológica utilizada por los comentaristas, alcanzará a nuestro país, que no supo -hay que reconocer que en aguas apacibles es muy difícil evocar tormentas- desmontar a tiempo el inmenso andamiaje inmobiliario. Recuerdo en el año 2000 la desbordante satisfacción con que un miembro del Gobierno de entonces decía que España "construía más que todos los países de la Unión Europea juntos". Pues ahora, sufre más desempleo, lógicamente, que todos los países de la UE.

Sigo teniendo esperanza en el demócrata Obama. Y es que, por el bien de Europa -que ha permitido tantos excesos "globalizadores", que se ha apartado de las Naciones Unidas, que ha deslocalizado en el Este una parte considerable de su producción, que sigue tolerando la dependencia en defensa y la existencia de paraísos fiscales...- confío en que se produzca, impulsada por los ciudadanos que no pueden seguir siendo adormecidos observadores de lo que acontece, una valiente "(r)evolución democrática" de la Unión Europea, consciente del extraordinario papel que le corresponde desempeñar en estos momentos-.

De otro modo, los P

I

G

S

caerán uno tras otro... Pero no se detendría ahí. Luego vendría I..., y luego Bélgica... y...

Y, lo que es peor, la Unión se iría des-uniendo, las clases dominantes se impondrían en los distintos países para hacer frente "con energía" a una situación de la que son responsables en buena medida... y el sueño de la Europa unida, faro y torre de vigía, se iría desvaneciendo...

2 comentarios

Anónimo dijo...

Resistencia. Aqui, en Francia donde muchos son hijos o nietos de espanoles inmigrantes, desgraciadamente hemos rechazado Europa en 2005, somos una minoridad pro-europeos.
Un cordial saludo.
Olivier d'Arexy

13 de enero de 2011, 10:12

Europa, por desgracia, dista mucho de ser lo que pretendemos que sea, o pretendimos ser, un modelo económico y cultural alternativo al americano. Ya lo dijo Margaret Thatcher, la campeona del "Neoliberalismo Europeo", la que lo introdujo procedente de Chile (por su relación con Pinochet) donde Milton Friedman y otros miembros de la Escuela de Chicago utilizaron el cono sur como conejillos de indias de sus "flamantes" tesis económicas, que bien valieron un Nobel.
"Estoy convencida que usted entenderá que, en Gran Bretaña, dadas nuestras instituciones democráticas y la necesidad que aquí existe de alcanzar un elevado nivel de consenso, algunas de las medidas adoptadas en Chile son del todo inaceptables. Nuestra reforma debe ser conforme a nuestras tradiciones y a nuestra Constitución, aunque, a veces, el proceso pueda parecer exasperadamente lento", dijo "La dama de hierro". Bueno, "el proceso", después de décadas de Neoliberalismo en las actividades político-económicas Europeas, está más que aceptado e interiorizado. Y esa es nuestra lacra.
Un saludo. Siemopre es un placer leer sus análisis, reflexiones, opiniones... con esa facilidad de palabra y entendimiento con el que escribe.

15 de enero de 2011, 0:52